viernes, 12 de noviembre de 2010

Sigo


Sigo, a pesar del tiempo transcurrido, sigo con mi enorme deseo de huir de mis obligaciones, de mis responsabilidades, del mundo que me rodea y me presiona para hacer siempre algo.

Sólo quiero huir, alejarme de todo y pensar, observar un hermoso paisaje y dejar que mi mente navegue libre por donde los pensamientos la lleven, sin apuros, sin tiempos, tratando de que los recuerdos tristes de mi vida no me acompañen, intentando solamente lograr la paz de mi espíritu maltrecho.

Soledad absoluta, meditación y descanso, salvo alguna lectura, ningún otro contacto con el mundo exterior, ni net book, ni siquiera música, sólo quiero escuchar los sonidos del silencio, son los únicos que llenan mi alma de paz. Es mucho pedir?